Preguntas

Pregunta:
Estoy comenzando un programa de tratamiento para la dependencia de químicos. He asistido a reuniones de 12 pasos durante años, y cuando comencé tenía un concepto muy limitado de Dios. Ahora, después de practicar UCDM, mi concepto de Dios parece demasiado complicado, y siento que debo dejarlo ir. ¿Cómo puede uno entregarse a Dios? No parece ser simple.

Respuesta:
Rápidamente se hace evidente que la "condición humana" era de dependencia del ego. Pero los pensamientos del ego solo parecen velar la verdad del Ser Único. Nuestro verdadero Ser Crístico no está afectado por la ilusión. Tú escribiste: "mi concepto de Dios ahora parece demasiado complicado, y siento que debo dejarlo ir". Estás en lo cierto, ya que tener en cuenta cualquier concepto, incluido un concepto de Dios, con la excepción del perdón completo: el concepto final, es un bloqueo a la verdadera liberación.

“¿Cómo puede uno rendirse a Dios?” y  “¿Cómo se acepta el perdón?” Estas son la misma pregunta, y la respuesta es el Espíritu Santo. El Espíritu Santo es una decisión y todo lo que se te pide es que estés dispuesto a decidir por Dios. Cada momento que haces esto con total disposición es un milagro, y  la necesidad de tiempo y milagros ha terminado. La aplicación de UCDM, con la voluntad de no hacer excepciones a las lecciones del libro de ejercicios, es lo que podríamos llamar "práctica". Y cada momento, si es aceptado para el Propósito del Espíritu Santo, es una oportunidad completa para simplemente dejar ir. Estoy unido a ti en este Propósito y no podemos fallar. Ya que la Voluntad de Dios está hecha. Nada puede cambiar el Amor eterno.

Con cada momento dispuesto, parece crecer un impulso, y también parece crecer la confianza y la certeza sobre la Guía del Espíritu Santo. Este impulso es como un maremoto de amor. Y a medida que las últimas arenas del ego son arrastradas, es obvio que el Amor es todo lo que hay. ¡La creencia en los opuestos se ha deshecho! Estate abierto a este pensamiento feliz y verdadero con cada paso en el que eres guiado en el camino hacia la recuperación o el reconocimiento del Espíritu.

Se ha dicho: "Deja ir y deja a Dios". Este es un buen consejo. Deja el "cómo" al Espíritu Santo, porque los medios y los fines son uno para Él. Solo estate dispuesto. Más no puedes hacer. El resto se te será dado.

¡Te amo! David