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¿Quién es Dios exactamente? ¿por qué orar?

Pregunta:
Durante muchos años he entendido a Dios como una especie de ser, o una conciencia omnisciente, que me conocía, pensaba en mí, y en todos los demás en este universo y más allá. También veía a Dios como el creador en este mundo que se está formando constantemente. Ahora no sé nada de eso. ¿Qué es Dios? ¿Sólo el ser? ¿Yo Soy? ¿Qué es eso exactamente? Si Dios es sólo el ser, o la existencia, entonces ¿por qué molestarse en rezar una oración? ¿Quién la escucha, aparte de mí? ¿De qué puede servir? Gracias de antemano.
Respuesta:
Gracias por escribir. Eres una bendición. Siempre es maravilloso saber de ti. Tú eres lo que has estado buscando. La identidad en Dios está más cerca que un soplo.
Dios es el Amor Eterno que permanece por siempre y para siempre y es conocido cuando todos los conceptos de tiempo-espacio se han disuelto. Vaciar la mente, como en la práctica Zen, es limpiar el Altar a la Mente Divina. Dios crea el Espíritu, y la «materia» es simplemente la materia o el enfoque del perdón/liberación de las ilusiones que nublan la mente. La oración es el deseo del corazón, y la verdadera oración es el deseo único o la ausencia de deseo que trasciende los múltiples deseos de cosas y experiencias perceptivas que el ego (error) ansía. La verdad es simple porque es una. Se reza continuamente, y por eso es importante estar atento a lo que se pide o desea.
Dios conoce la oración del corazón. Más allá de las palabras y las preguntas y los símbolos hay una experiencia de certeza en la que no hay duda. Es imposible ser verdaderamente otra cosa que esta certeza. La pregunta y la respuesta, el que pregunta y el que es preguntado, sólo parecen ser diferentes en los sueños. Sin embargo, hay un punto, un estado mental, en el que todo se experimenta como Uno.
Los conceptos fueron hechos para negar lo Eterno. En el perdón de lo que nunca fue hay un concepto final, aceptado para ocupar el lugar de los «muchos». Desaprende todo concepto de tiempo y todo conflicto y duda se deshace.
La presencia del Yo Soy es Espíritu Puro. Sólo este Ser puede ser conocido. Todo «lo demás» se desvanece y se oscurece y desaparece, porque el tiempo nunca podría venir a tomar el lugar de la Eternidad.
Yo estoy contigo en todo el camino de la simplicidad. Siempre estoy feliz de hablar contigo y puedo llamarte si crees que sería útil. Que tu desaprendizaje sea Alegre y nuestra Mente permanezca en Paz para siempre. Recorremos el mismo camino, y el camino es fácil. El camino hacia adentro es natural. Tú eres mi mismo Ser en el Amor, y me regocijo en nuestra Inocencia. Nada más fue verdad. Sigue brillando nuestra Luz. Es taaaan brillante, como lo eres Tú. ¡Tú eres el Único!
En gratitud y amor, David