Preguntas

Pregunta 1:
¿Es útil “pensar positivamente” para hacer un mundo mejor, sólo por tener pensamientos positivos?

Respuesta 1:
Pensar positivamente siempre implica un opuesto. Es por esto que las afirmaciones no son el cuadro completo. Si utilizas afirmaciones o el pensamiento positivo aún y cuando todavía tienes creencias inconscientes del ego ¡es como poner glaseado dulce a un pastel de lodo! Por esto es que el camino del Curso y de toda verdadera espiritualidad es traer la oscuridad a la luz, en lugar de intentar tapar la oscuridad y ocultarla. 

Frecuentemente el camino está impregnado de lágrimas y surgen muchas emociones intensas cuando permites que afloren los sentimientos. Una de las cosas que más estoy disfrutando aquí en Argentina es la disposición que tienen para expresar las emociones y llorar. En  muchas reuniones que tengo en los Estados Unidos, mucha gente no se permite llorar. Pero es muy sanador y catártico. Ayuda más que traer una máscara y pretender que todo está bien. Una amiga notó que en las reuniones la mayoría son mujeres y ocasionalmente uno o dos hombres. Platicamos de esto anoche, y comentaba que de acuerdo a los estereotipos sexuales es más aceptable que las mujeres lloren. El esposo de mi amiga comentó como un hecho que los “hombres machos” nunca asisten a estos grupos. Esto es solamente otra demostración de que todo está basado en creencias y realmente no en cuestiones masculino/femenino. Llorar puede ser un símbolo de apertura.  

Pregunta 2:
¿Hay más asistencia de hombres en grupos americanos del Curso?

Respuesta 2:
Hay lugares en donde parece haber más hombres, pero generalmente no lo noto. He llegado a un punto en donde todo lo veo igual –gente, perros, objetos– es un entretejido completo. No hay objetos animados contra inanimados, orgánico e inorgánico, grande o pequeño. No veo diferencia alguna entre ciudad y país o entre muy poblado y rural. Todo es cuestión del propósito. 

Hay una gran sección en “Un curso de milagros” que se titula “Cómo fijar la meta”. Si pones tu meta por delante es como llevar una antorcha de luz. Cuando tu objetivo ha sido claramente definido percibirás todo y a todos atestiguando la meta que estableciste. No verás excepciones. Cuando no estableces una meta clara, las situaciones en tu vida simplemente parecen ocurrir y el ego mira en retrospectiva para ver lo que sucedió y decidir si le gustó o no. Esto siempre es muy frustrante.

En la historia de la esposa de Lot de la Biblia, se le dijo que no mirara atrás o se volvería una estatua de sal. Piensa en eso la próxima vez que empieces a mirar atrás en algo que ya sucedió. El ego, congela tu mente en el pasado.

Con amor, David